Deja de buscar tu propósito

Al igual que con la felicidad mucha gente se clava con la idea de encontrar su propósito en la vida, esa razón de su existencia, creyendo que en el universo existe una misión a la que vinieron a este mundo que está tan oculta que tienen que viajar, escalar una montaña y recibir la iluminación, es decir, ¿jodidos los que no podemos hacer ese viaje de introspección?… disculpa que te lo diga, aunque es una idea muy romántica, es muy falsa.

Y dirás, ¿este wey de qué está hablando? “pero claro que todos tenemos una misión”, puede que la tengas o pueda que no, digo, si tanta gente se rompe la cabeza y nunca la encuentra, ¿entonces nunca la tuvieron no crees? y lo peor es que cuando se muere alguien que no había descubierto ese misterioso propósito…. te dicen… “esa era su misión en la vida, enseñarnos con su muerte… que….” no chingues… como que para descubrir tu misión hay que morirse.

Y te voy a decir por qué si debes de dejar de buscar ese famoso propósito en la vida, es simple… si lo buscas igual que a la felicidad, puede ser que lo estés ignorando por completo… que lo tengas justo enfrente y simplemente estés ciego.

Un día estaba leyendo el libro que les voy a recomendar, está chingón, porque por lo menos a mi me sirvió para confirmar que no estaba tan loco como creía, me ayudo a poner en una frase mi misión en la vida, “ayudar a cuantas personas pueda” el libro es Sapiens, Breve Historia de la Humanidad, y en resumen hagamos lo que hagamos por trascender, por nuestras generaciones futuras, vale madres, en 10,000 años no quedará ni rastro de la humanidad, por lo que lo mejor es simplemente dedicarte a ayudar a los que están a tu alrededor… así de sencillo…

Pero esto de ayudar a los demás es tan sencillo que parece inverosímil ¿no?, pero hay mucho fondo en este propósito universal, si uno hace algo por los demás, hace algo por sí mismo y entramos a un círculo virtuoso.

Y hay tantas cosas en las que podemos ayudar a los demás, que tu propósito está en lo que disfrutas hacer, en lo que te apasiona hacer, vives para tu familia, ver por ellos, ESE ES TU PROPÓSITO, mucha gente pierde el tiempo creyendo que los propósitos deben de ser “inventar una medicina revolucionaria” , “ser presidente del país” o “ser millonario”, y sí, nuestro propósito nos puede llevar muy lejos, pero nunca hay que confundir el por qué estamos aquí con una meta.

Una vez que defines tu propósito: lo que te gusta y por quien lo haces, estás un paso más cerca de tener una vida plena, una vida satisfactoria, checa la entrada de lo que hay además de la felicidad aquí mismo.

El propósito no es una carga, es una pasión que se comparte.

Porque resulta que empiezas a trabajar en tu propósito, y resulta que de pronto quieres dar más, llegar a más gente, en ese momento, inicia un camino hacia una meta mayor del mismo propósito, porque esa es otra gran verdad: un propósito no es una meta, puedes tener todas los que quieras, vivir para más personas, para hacer todas las cosas que te apasionan.

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