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¿Por qué ch*ngados somos incongruentes?

¿No les pasa que han escuchado a más de una persona decir “me cae mal porque es un incongruente”? Pero, ¿me creerías si te digo que todos somos incongruentes?…

El ser humano es incongruente y te voy a decir por qué lo somos, la culpa de esto es principalmente de las creencias y los constructos sociales que nos van inculcando desde pequeños, lo que aprendemos de la religión, del ejemplo de nuestros padres, de lo que nos enseñan en la escuela; lo que vamos viviendo en el trabajo, con los amigos y en las relaciones personales.

Nos llenamos de creencias que si tenemos suerte, eventualmente terminarán contradiciéndose, ¿qué, qué? ¡no chingues!, ¿cómo?, bueno te voy a tratar de explicar el por qué digo que si tenemos suerte.

Un ejemplo muy común es cuando la religión, que es sin duda uno de los mayores unificadores de la sociedad, tiene algunas ideas como por ejemplo, que el dinero y el poder corrompen, o que el sexo por placer es pecado, pero al mismo tiempo el Vaticano es de los países más ricos del mundo y la misma iglesia aprueba un método anticonceptivo conocido como “el ritmo”, que dices: “está mal tener sexo por placer, pero entonces está bien si me cuido para no tener hijos”… ¿perdón?

Ahora sumemos las incongruencias que se empiezan a generar cuando empezamos a crecer y queremos ganar más dinero, pero también quiero descansar, disfrutar la vida, tener hijos, viajar un chingo, ser empresario, tener un ingreso seguro, dormir mis 8 horas, hacer ejercicio, poder pasar tiempo con la familia, mantener mi vida en equilibrio, practicar yoga, rezar el rosario, ser un padre ejemplar que provee todo a su familia… ¿ya cacharon las incongruencias?

Y me dirán, bueno, puedes ser un poco incongruente en algunas cosas, pero no puedes ser incongruente en temas “delicados”, otra incongruencia, ¿no? El ser humano es y será siempre incongruente, por la complejidad de nuestros tejidos culturales, por la libertad que tenemos para aprender, cuando nos exponemos al mundo, cuando queremos de verdad ser empáticos con las demás personas, invariablemente terminaremos adoptando nuevas formas de pensar, y ¿por qué digo que es lo mejor que nos puede pasar?… Esta inconsistencia, estas contradicciones a las que se empieza a enfrentar el ser humano, siempre terminan siendo motores de cambio, gracias a que somos incongruentes y que podemos adoptar diferentes posturas y de pronto querer una cosa, a pesar de tener una creencia que se opone, estamos tratando de crecer.

No digo que toda incongruencia sea productiva, o que todas nuestras contradicciones personales nos estén ayudando a cambiar, pero lo que si creo es que la gente que se la pasa juzgando la “incongruencia” de los demás, son personas que no terminan de aceptar la naturaleza imperfecta del ser humano, generan juicios que los limitan, porque cuando juzgan a una persona y tachan la incongruencia como algo a “evitar”, están negándose ellos mismos a crecer y a aprender.

Si vivimos en una burbuja de cristal, como quizás muchos pueblos con culturas muy cerradas, podríamos experimentar un cierto grado de congruencia, pero es porque nuestro cerebro no tendría mayor fuente de información para generar ideas contradictorias; se me viene a la mente una frase:

“Dime que tan congruente eres y te diré que tan limitado eres”

¿Qué debemos de hacer? ¿aceptar que todos seamos unos incongruentes? Lo que yo diría es: abraza la incongruencia, cuestiona que es lo que te está diciendo esa contradicción personal y crece; no es decir “ah, pues ya soy incongruente por naturaleza y ya” sino preguntarnos por qué soy incongruente, corregir esas incongruencias que nos son poco productivas o poco favorables y sobre todo no juzgar las incongruencias del otro, no ver, como dicen, la paja en ojo ajeno, mientras tenemos una viga en el nuestro.

Libro recomendado para este tema y para la vida en general:

Créditos

Imagen: Freepik.com | Usuario : @freepik

One Comment

  • Juan Carlos Ruelas

    junio 25, 2020 at 9:56 am

    Una visión bastante amplía respecto al tema que sin duda deja ver la oportunidad ante las posturas que adoptamos a temas como en este caso la incongruencia.
    Tu perspectiva me hace darme cuenta que tal vez cuando evidenciamos la incongruencia de alguien es por que por lo general viene acompañada más bien de una acción a conveniencia y que no necesariamente y muchas veces no es del todo percibida como de beneficio para la otra persona o que tal ves a criterio de quien señala la incongruencia en el momento no es moralmente aceptada por esta misma(por dar un par de ejemplos) que en definitiva en el momento que es señalada como incongruencia por l otra persona no es tolerada en la interacción social que están teniendo , inclusive todo un grupo social de individuos puede estar en desacuerdo con una persona por que en el momento no va de acuerdo con la forma de darle valor a un acción decisión o pensamiento. De común acuerdo a lo que escribes este sería el acto más incongruente de todos ya que precede un acto de un juicio de valor por parte del resto de los individuos interactuando, Y que muchas veces es una trampa en donde disfrazamos nuestros prejuicios con un señalamiento de incongruencia entre el pensar y el hacer de una persona cuando en realidad la mayoría del tiempo caemos en hacer juicios de valor de todo y de todos , definitivamente la clave es ser abierto y analítico !! Y sin duda de manera personal darte la oportunidad de crecer y ampliar tu espectro de pensamientos y creencias sin olvidar que son primordialmente para tu desarrollo personal!! Gran artículo !!

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